Amor no correspondido, oración para sanar el corazón

Oraciones mágicas y poderosas

Oración al ángel del amor para curar dolores de corazón producidos por el amor

Querido Ángel del Amor
bendice mi corazón y mi mente
y llénalos de amor.
Renuncio hoy ante tus ojos a la soledad,
al desamor y al abandono.
Quiero que me ayudes a reponerme
de este dolor emocional y me prepares
para recibir de nuevo mieles del amor,
pero cerciórate querido Ángel,
de que sean sanados
todos los recuerdos negativos
de mi pasado amoroso.
Para que pueda ver lo nuevo del amor
en las personas y en mi mismo (a).
Confió en tu voluntad,
y deseo que se realice lo mejor para mí.
Amén.

Oración para curar el corazón por un Amor no Correspondido

si algo algo doloroso y desesperante en el amor, es un amor No correspondido, para aliviar y curar el dolor del corazón reza esta oración

Señor, ilumíname en tu manto rosado de amor divino.
Crea en mí el perdón universal
Para que mi alma libre vuele de nuevo
Entre las nubes de la ilusión y de la Fe
Para que pueda perdonar a aquél (aquella) que se alejó de mí
Que mi perdón le alcance y mis sentimientos más profundos
estén con él (ella) a fin de que pueda estar listo para la llegada de un nuevo amor a mi vida
Así quede escrito porque así se hace en este momento.
Amén

Conjuros de amor

La palabra conjuración (del latín "conjure", "conjurare", jurar en conjunto) puede ser interpretada de diferentes maneras:

Como una invocación o evocación (la última en el sentido de estar atado a una promesa); como un exorcismo, o como un acto de ilusionismo.
La palabra es usada muy frecuentemente como sinónimo de "invocación", a pesar de que estas dos no son sinónimos. Alguien que realice conjuraciones es llamado "conjurador".
El texto de los hechizos a recitar para conjurar los espíritus varía considerablemente, desde oraciones simples hasta complejos parágrafos con un sinnúmero de palabras mágicas. El lenguaje a usarse es generalmente el del conjurador, pero desde las épocas medievales en la tradición occidental, el latín fue el lenguaje más usado (sin embargo muchos de estos tipos de texto han sido traducidos a otras lenguas).
La conjuración de los fantasmas o el alma de los muertos con el propósito de adivinación es llamada necromancia.
Cuando se dice que una persona está llamando o conjurando la mala suerte o enfermedad, es debido a la creencia Antigua de personificar enfermedades o desgracias como entidades diabólicas, espíritus o demonios; los cuales podían penetrar el cuerpo de un ser humano o animal.
La noción de la acción de conjurar esta tradicionalmente ligada a la tarea de alejar espíritus negativos y proteger un individual, su espacio o un espacio en colectividad. Sin embargo muchos piensan, especialmente en las sociedades Cristianas e Islámicas, que magia y por lo tanto conjuración, es una práctica inherentemente diabólica. De acuerdo a estas creencias, los conjuros evocan demonios u otros espíritus diabólicos a causarle mal a las personas o cosas, a obtener favores de ellos, o simplemente a entregarse en servidumbre a tales entes.
Esta misma creencia de la conjuración también existe en sistemas de creencias en las cuales magia es no inherentemente diabólica, aunque en estas culturas estos "magos negros" no son la regla y tienen opciones entre magos más tradicionales.

 

 

  

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